La solución propuesta por nuestro grupo se centra en reducir las pérdidas de la industria alimentaria en la fase de producción, en particular, de los sectores lácteos y cárnicos. La FAO establece que el 38% del consumo total de energía en el sistema alimentario mundial se utiliza para producir alimentos que se pierden o se estropean, haciendo evidente que las disminuir los desperdicios es clave para reducir la huella ecológica del sector.

Se dispone de sistemas ópticos capaces de reducir la pérdida de sólidos durante la producción de quesos, en particular a través del control de la firmeza de la cuajada y/o la sinéresis, así como controlando cambios en la materia prima, como el tamaño de las micelas de caseína, o bien la capacidad emulsionante y espumante de las proteínas del suero. También se aplica en la cocción de emulsiones cárnicas para reducir las mermas.

El sistema se basa en un conjunto de sensores de fibra óptica a medida, realizados por encargo, que permiten ser utilizados a nivel de laboratorio e incorporados en los equipos industriales. Por primera vez se introduce una tecnología de este tipo que se puede configurar inline, la cual, además, es más económica y rápida que las existentes actualmente en el mercado y permite tomas de decisión y rectificaciones durante el proceso de producción. Esta optimización de procesos aporta como beneficio adicional una disminución de los consumos energéticos.

Actualmente han manifestado interés por nuestra solución diversas empresas productoras de alimentos (end-users), empresas fabricantes de maquinaria para la industria agroalimentaria, así como empresas integradoras y de fotónica.